Reflexión

Bueno esto va a tratar de ser una reflexión sobre mí y mi forma de encaminar mi vida últimamente, no sé qué hacer, no sé que me pasa, pero últimamente estoy arta, arta de mí, de mi constantes luchas con la vida, de lo que me rodea, no sé como solucionarlo, como salir de tunel y llegar a la luz, esa luz a la que todo el mundo me dice que llegaré cuando salga de la mala racha pero realmente ahora tan solo veo una gran y profunda oscuridad.

Estoy tan cansada, quizás sea eso, cuando estoy muy cansada todo lo veo negativo y estoy mucho más suceptible, estoy realmente enojada, enojada en mi interior y ello me hace tener una mala actitud frente a las cosas que me vienen y en la forma de sobrellevarlas.

Estoy así quizás porque no me gusta lo que estoy haciendo con mi vida, porque no me siento satisfecha con ella, frustrada por llevar más de 3 meses sin ser económicamente independiente, desalentada porque pienso que quizás me equivoqué el momento que tome la decisión de hipotecar mi vida sin estar aún emocionalmente preparada para soportar este yugo, enojada porque a mi proyecto no le veo la luz, arta de que se me caiga la casa encima, insatisfecha porque no estoy ejerciendo mi profesión, irritada porque no dispongo de tiempo libre, astiada de pelearme porque las cosas sean justas, de sobrellevar la "eterna guerra", en fin me siento morir por dentro, no sé si alguien me entenderá, si alguna vez se ha sentido de esta forma. No quiero si quiera mirarme al espejo, no quiero ver mi imagen, en ella veo una desilusión constante, pienso y reflexiono que debería estar agradecida por lo que tengo pero no puedo evitar caer en el mayor de los pesimismos y no ver más allá de ello. Leo y reflexiono sobre el fin de la vida, en que uno debe hacerse la estancia agradable y disfrutar de las pequeñas cosas, pero me pierdo en infinidad de cosas que me desvian de mi camino y me desvinculan de la armonía.

Como anécdota, ayer Sábado, fui al cine, hacía tanto tiempo que no iba que me sentí como una niña pequeña, la última vez que fui fue en Mayo, por mi santo, a ver Indiana Jones, cuando escuché la cancioncilla del Movie Record hasta me emocioné, todo muy bien pero cuando llegué a mi casa y me acosté, no pensaba en esa sensación tan buena que había sentido, sino en que me parecía realmente triste que con 25 años, en plena flor, no pueda ir siquiera al cine, siento que éste debería ser el momento de estar disfrutando, entrando y saliendo, sinceramente siendo un poco consumista y disfrutando de ello, son 25 y a veces siento que tuviera 40 y como una gran piedra aplastándome bajo ella, me sentí triste. Hace poco me he ido a Londres, todo un intento de despejarme y venir con las pilas cargadas, intento en valde, vengo igual bueno igual no porque me he cargado todo el dinero ahorrado de mis reyes y lo poco que hemos podido rejuntar, no es que no me lo haya pasado bien, pero no sé si es porque ha sido muy corto pero esperaba que fuera como una bocanada de aire fresco para mi alma, en muchas otras ocasiones cuando me he sentido así me ha aliviado, en fin creo que deberé ir por la Meditación.

Siento que alguien debiera tirarme de la mano y sacarme del tunel porque me hallo tan perdida, quizás me perdí en el sendero y escogí el camino que no era y me desvié, no sé como traducir a palabras ese resquemor que llevo por dentro, siento tantas cosas a la vez, pero sobre todo siento que me ha abandonado esa alegría que antaño tenía, esas risas, hace tanto que no me rio de verdad, quizás no me haya abandonado quizás yo la eché con mi actitud.

Sé que el problema puede no estar fuera sino en mi interior, y no se trata tanto de cambiar lo que me rodea como cambiarme a mí, para arreglarme y para evitar el recaer, pero... cual es la tecla que debo pulsar, cuál...

Sé que desde que mis padres se separaron no he vuelto a ser la misma, algo se me rompió dentro y aún no he sabido cómo arreglarlo, y no puedo evitar pensar el verme reflejada en todo eso y un miedo indescriptible recorre todo mi cuerpo, no quiero acabar así, ni pasar por lo mismo, cómo muchas cosas dentro de mí se rompieron, muchos esquemas y creencias y cómo casi me voy con ellos, mi forma de ver la vida cambió tanto que pienso que a mi mente no le dió tiempo de asimilarlo y por eso veo como constantes flash de todo ello. No culpo a nadie, simplemente es así, es la realidad y se que en la vida hay un millón de cosas peores, pero el que lo haya sufrido podrà entender gran parte de lo que digo, y como en ella ocasión, no siento que contandolo pueda ayudarme, no me ayuda el nudo sigue estando en mi garganta, además ya tiene suficiente cada uno con lo suyo para añadir más y que encima no me alivie.

Cada noche cuando me acuesto me paro a pensar en el día que he tenido, y cómo acabo pensando cómo esto no es lo que quería para mí, para mi vida, y en el por qué por ejemplo no consigo dejar de fumar, porque esa ansiedad recorre mi cuerpo durante todo el día, cómo en épocas anteriores pude dejarlo sin pensarlo dos veces y cómo ahora no puedo, me entra una presión en el cuerpo y una angustia en el estómago que no sé cómo eliminar, al final siempre acabo con un cigarrillo en la boca preguntándome porqué estoy así y porqué no lo consigo, muchas veces me digo que no tengo que presionarme tanto, que cómo me dijeron una vez, no tengo que demostrale nada a nadie, que ya he demostrado y me justicado de sobra en mi vida, pero quizás ese sea mi problema, no puedo dejar de hacerlo, sigo exigiendome un nivel muy elevado que probablemente ahora mismo no esté dando y sigo teniendo la necesidad de demostrarle a todo el mundo que yo también valgo. Me siento como apretada en una cajita pequeña, no sé.

Quizás simplemente se trate en un proceso de maduración que estoy generando en mi interior y que como cuando damos un estirón conlleve muchos daños colaterales.